Mi lista de blogs

martes, 23 de agosto de 2011

SOLO QUIERO QUE ME ESCUCHES...


Carlos Rivera

Estoy comprando mis diarios, de repente veo que alguien me mira un tanto sigiloso desde una esquina. Voy avanzando y me habla entre lágrimas. Es mi amigo de casi toda una vida, a quien veo de tiempo en tiempo. Con él compartí aventuras de adolescente y las comunes mataperreadas propias a esa edad.
Está con el tufo de haber bebido como cien litros de pisco. Está sumergido desde hace tiempo en medio de las comparsas de la bebida, la indiferencia de su familia y su menor hijo. Trata de hacerme bromas: es lisonjero y atrevido pero no me molesta. De pronto no puede más y se destroza. Me habla: “mi mujer me ha dejado y se ha llevado a mi hijo. Mi padre no me escucha y mis hermanos me ha mandado al diablo. Ayer dormí en la calle y no paro de chupar…”
Estoy conmovido, veo que la gente al verme sentado a su lado oyendo sus tribulaciones me comparte el sentido de desprecio e indiferencia que tienen reservado para seres como él.
Me importa olímpicamente lo que digan o lo que piensen, de hecho siempre he detestado el circunloquio protocolar que tiene la gente desde sus prejuicios por un indigente, un alcohólico o un hombre miserable. Luego, van a la iglesia y sufren en el arrebato de sus hipocresías, precisamente por esos que tanto repudian en el trayecto de cada día. Aspiran al ceremonioso compartimiento de indulgencias con hombres ecuánimes cuerdos y señoritos bien hablados y bien educados. Es decir,gente decente.
Mi amigo ahora está un poco mas calmado, pero continúan sus suspiros. Lo abrazo y le digo que tengo que ir a trabajar. -No te vayas- me dice: Solo quiero que me escuches…

No hay comentarios: