Carlos Rivera
Periodista y escritor
Uno de los aspectos mas pintorescos y risibles de nuestra sociedad peruana, es aquella capacidad por inventar falsas leyendas de éxito o convertir las medianas victorias de algún compatriota en dignos actos de heroísmo cual si fuera Leónidas en medio de la batalla de las Termópilas frente a las huestes de Jerjes.
Periodista y escritor
Uno de los aspectos mas pintorescos y risibles de nuestra sociedad peruana, es aquella capacidad por inventar falsas leyendas de éxito o convertir las medianas victorias de algún compatriota en dignos actos de heroísmo cual si fuera Leónidas en medio de la batalla de las Termópilas frente a las huestes de Jerjes.
Esto tiene su génesis en la pírrica histórica nacional, escasa de victorias, héroes y líderes que nunca construyeron verdaderas epopeyas que eleve al populacho al nirvana de un autentico delirio.
No solo ensalzamos a los hombres y nos creemos la última chupada del mango. Los mejores del mundo por nuestra gastronomía. Poseedores de la mejor variedad de papas del mundo. Fuentes de los climas más variados y maravillosos del planeta. Primer productor mundial de plata, sexto de oro. Sumemos a esto, ejemplos de hombres sabios e inmortales como Vallejo, Paulet Mostajo y contemporáneas hazañas deportivas como el Mundial de Surf ganado por Sophia Mulanovich o la Copa Sudamericana obtenida por Cienciano en el 2003 y, desde luego nuestro Premio Nobel 2010, Mario Vargas Llosa. Pero, lo citado corresponde a cosas ciertas que cualquiera reconoce sin atisbo de esfuerzo.
No solo ensalzamos a los hombres y nos creemos la última chupada del mango. Los mejores del mundo por nuestra gastronomía. Poseedores de la mejor variedad de papas del mundo. Fuentes de los climas más variados y maravillosos del planeta. Primer productor mundial de plata, sexto de oro. Sumemos a esto, ejemplos de hombres sabios e inmortales como Vallejo, Paulet Mostajo y contemporáneas hazañas deportivas como el Mundial de Surf ganado por Sophia Mulanovich o la Copa Sudamericana obtenida por Cienciano en el 2003 y, desde luego nuestro Premio Nobel 2010, Mario Vargas Llosa. Pero, lo citado corresponde a cosas ciertas que cualquiera reconoce sin atisbo de esfuerzo.
El Pensamiento Jotita se circunscribe a esa huachafa manía de condecorar con el olivo de la gloria cualquier hecho que a simple vista no tiene significado ¿Qué valor tiene que los jotitas hayan clasificado quinto al Mundial de Futbol Sub 17 terminando ¡octavos! en esta competencia en la fase final? ¿Qué razón motivadora o inspiradora tienen las matadorcitas y sus victorias decorosas para dedicarles series de televisión y especiales por doquier? Qué de inspirador tiene ese casi casi.
La farándula es la principal motivadora y a la vez instigadora de dignificar dichas vidas y ha creado Cholywood para otorgarle más categoría a esa expresión mediática donde abunda una mescolanza sui generis de trogloditas en pos de una foto, una cámara que los filme o una entrevista con un lenguaje que no pasa de las 20 palabras. Los políticos en su mayoría huérfanos de inteligencia y de ética saben que esa performance brinda réditos de popularidad y se prestan para el compartimiento de esas vidas y auxilian a los programas de Tv para ponerse a disposiciones del bendito rating.
El pensamiento jotita nos lleva a recordar la viejas glorias de los 70 en cada fase preparatoria, sea para el mundial o la Copa América. A creernos inmortales y dignos herederos de un imperio Incaico que todos juzgamos justo, perfecto, maravilloso y milenario cuan sabemos que no pasó de cuatro centurias El pensamiento jotita obliga a decir al presidente Alan García que somos la envidia de Sudamérica y del mundo por que soportamos la crisis mundial del 2008.
El pensamiento jotita los hace creer algunos que el Perú puede ser Suiza,y sobre todo que somos un país al cual muchas naciones les importamos, cuando la verdad en sus referencias geopolíticas solo somos un referente de una cultura que se reduce a una comarca que empieza con Machu Pichu y acaba con Gastón Acurio.
El pensamiento jotita los hace creer algunos que el Perú puede ser Suiza,y sobre todo que somos un país al cual muchas naciones les importamos, cuando la verdad en sus referencias geopolíticas solo somos un referente de una cultura que se reduce a una comarca que empieza con Machu Pichu y acaba con Gastón Acurio.
El pensamiento jotita confunde la inteligencia con la argucia, defenestra la razón y la suplanta con la fanfarronada. Crea espejismos de paraísos imposibles donde solo hay un tambo. No es que ataque ese idealismo simplón por que carezco de sueños o ideales, pero creer que esa particular actitud de leer cuentos tan ingenuos nos va cambiar la historia (o nuestra vida) me parece digno de una candidez y superchería.
No hay comentarios:
Publicar un comentario